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CABO ORTEGAL YA ES XEOPARQUE MUNDIAL DE LA UNESCO

Durante la 216º Sesión del Consello Ejecutivo de la UNESCO, celebrada en su sede de París, y tras examinar los documentos e informes emitidos en diciembre del 2022 por los auditores que visitaron el territorio el pasado verano, la comisión de la UNESCO decidió respaldar al Xeoparque Cabo Ortegal y a otros 17 nuevos Xeoparques Mundiales.

Es el único de la Península Ibérica que obtiene este distintivo en esta anualidad, uniéndose así a los 15 xeoparques existentes en nuestro país.

La asociación para la gestión del Xeoparque del Cabo Ortegal, formada por los ayuntamientos de Cariño, Cedeira, Cerdido, Moeche, Ortigueira, San Sadurniño y Valdoviño recibe con una gran satisfacción esta noticia, resultado de años de intenso trabajo, agradeciendo el trabajo de todas las personas que hicieron de este un proyecto ganador: entidades amigas, comité científico, asesores, empresas proveedoras, vecinas y vecinos…

El alcalde de Cedeira, Pablo Diego Moreda quiere destacar a mayores el gran trabajo y compromiso que llevó acabo María José Rodríguez con este proyecto, siendo durante 4 años, en el primer mandato, la concejala de Cultura y Turismo.

El Xeoparque Cabo Ortegal pasa así a formar parte de esta red mundial junto las otras 17 nuevas candidaturas aprobadas en el día de hoy en todo el mundo: Caçapava y Quarta Colônia en Brasil, Lavreotiki en Grecia, Ijen, Maros Pangkep, Merangin Jambi y Raja Ampat en Indonesia, Aras y Tabas en Irán, Hakusan Tedorigawa en Japón, Kinabalu en Malasia, Waitaki Whitestone en Nueva Zelanda, Sunnhordland en Noruega, Bohol en Filipinas, Jeonbuk West Coast en Corea, Khorat en Tailandia, Mourne Guillion Strangford en Gran Bretaña y la ampliación del territorio del Xeoparque Kütralkura en Chile. Esta red pasa por lo tanto a estar compuesta por 195 espacios declarados como UNESCO Global Geopark, un sello al mismo nivel que lo de Patrimonio de la Humanidad. El Xeoparque Cabo Ortegal se convierte así en el segundo de Galicia, el primero de la provincia de A Coruña y el único de la Península Ibérica que obtiene este distintivo en esta anualidad.

Geoparques mundiales de la Unesco

El concepto de xeoparque surge a mediados de los años 90, dando respuesta a la necesidad de conservar y poner en valor zonas de especial importancia geológica, siendo el paisaje y las formaciones geológicas testigos de la evolución de nuestro planeta.

Un xeoparque por definición debe cumplir una serie de requisitos básicos. En primer lugar debe tratarse de un territorio unificado geográficamente, con referentes geológicos únicos y con cierto atractivo visual y de contenido para visitantes. Debe existir además una entidad con capacidad de gestión encargada de llevar a cabo una estrategia integral relacionada con la conservación de los recursos, la investigación, la educación, el turismo y el desarrollo económico y social. La estrategia marcada por este ente de gestión debe de estar en marcha incluso antes de la solicitud, con actuaciones de puesta en valor de la geología y medidas que garanticen la máxima participación social, ya que los xeoparques deben estar construidos de abajo arriba. Estos territorios deberán también contar con recursos económicos suficientes para llevarlo a cabo el plan de acción, que después puede ejecutarse con la colaboración de empresas y entidades del territorio.

La obtención de este distintivo de la UNESCO posibilita e incentiva, por lo tanto, la ampliación del conocimiento del territorio. Conforme el sustrato geológico va mudando, también lo hace la vida sobre él, adaptándose a las peculiaridades de cada zona, con unos paisajes determinados que definen nuestra realidad social, económica y cultural. Los xeoparques ejercen también como hilo conductor de un turismo sostenible y desestacionalizado, mezclando naturaleza con patrimonio, tradición, gastronomía…y por supuesto, con la geología.

Tenemos ejemplos en nuestro país de como la marca xeoparque repercute en el territorio en el que se encuentra. A destacar por ejemplo el caso del Geoparkea de la Costa Vasca (compuesto por los municipios de Mutriku, Deba y Zumaia), lo cual recibe cada año unas 150.000 visitas que descubren el territorio de la mano de las empresas locales. Además, el distintivo xeoparque facilita el acceso a fuentes de financiación y ayudas europeas, así como la generación de oportunidades de negocio que contribuyan a fijar población en las zonas rurales en riesgo de despoblación.

Geoparque Cabo Ortegal, pasado, presente y futuro

Tras años de trabajo colaborativo entre ayuntamientos y Diputación, en el año 2020 se creó la Asociación para la gestión del Cabo Ortegal. Esta asociación, impulsada y conformada por los ayuntamientos de Cariño, Cedeira, Cerdido, Moeche, Ortigueira, San Sadurniño y Valdoviño, contó con el firme impulso de la Diputación de A Coruña para fortalecer la candidatura. Así, gracias al apoyo de la institución provincial, por medio de su área de Turismo, se pudo ejecutar, mediante un convenio de colaboración, diferentes acciones que resultaron imprescindibles para el éxito de la candidatura, al tiempo que se intensificó el trabajo de difusión y socialización de los recursos del territorio.

De esta forma, ya en el año 2021, se replanteó la candidatura siendo en esta ocasión admitida como “candidatable” recibiendo, además, la mayor de las puntuaciones. Así, La Comisión Nacional Española de Cooperación con la Unesco presentó oficialmente ante el Comité internacional de Xeoparques de la UNESCO la candidatura del Proyecto de Xeoparque de Cabo Ortegal, para lo cuál hubo que presentar un amplio proyecto con 4 aspectos esenciales: 1. Patrimonio geológico de relevancia internacional, 2. Proyecto de gestión y desarrollo territorial, 3. Visibilidad y conocimiento del proyecto, 4. Trabajo en red con otros territorios.

El proyecto presentado fue evaluado en el año 2022 por dos auditores de la Unesco (Chris WoodleyStewart, director científico del North Pennines UGGp del Reino Unido y César Goso, coordinador científico del Grutas del Palacio UGGp de Uruguay) que, la finales de agosto de 2022, también visitaron durante 5 días el territorio para hacer una evaluación final in situ.

De los procesos de evaluación derivaron informes técnicos positivos que fueron elevados a la Comisión Internacional de Xeoparques de la Unesco que, en diciembre de 2022, propone, que en la siguiente reunión del Consello Ejecutivo de la UNESCO, se reconozca al proyecto de Xeoparque de Cabo Ortegal como Xeoparque Mundial de la UNESCO.

Ahora, tras todo este camino, el proyecto alcanza su momento culmen, en el que esta recomendación llega al Consejo Ejecutivo de la UNESCO, en su 216º asamblea celebrada en la sede de París esta misma semana, que reconoce ya oficialmente al Xeoparque Cabo Ortegal como Xeoparque Mundial de la Unesco.

Sin embargo, el distintivo no es permanente, sino que hay que trabajar constantemente para mantenerlo. Cada cuatro años es preciso pasar de nuevo por una auditoría similar, se cabe incluso más exhaustiva, la del nombramiento, en la que comprueban sobre el terreno que se están cumpliendo los objetivos de desarrollo, de conservación, educativos, científicos, de dinamización territorial, de comunicación, etc., y que efectivamente se están obteniendo resultados.

Cada xeoparque tiene un discurso propio y diferenciado de los demás, centrado en una etapa concreta de la formación de nuestro planeta, constituyendo así en su conjunto un relato que nos muestra como se configuró la Tierra durante millones de años. Es por esto que los xeoparques trabajan en red, manteniendo relación constantes a través de foros especializados y eventos en los que se intercambian experiencias y buenas prácticas.

En el caso del Xeoparque Cabo Ortegal, su riqueza a nivel geológico es indiscutible, destacando que este territorio alberga rocas en superficie de más de 490 millones de años, y materiales que habitualmente se encuentran a más de 70 kilómetros de profundidad, algo excepcional y que dase en muy pocos lugares de nuestro planeta. Además cuenta con un de los mayores y mejores afloramientos mundiales de ecloxitas, rocas producidas la grandes presiones. Estas son algunas de las razones que hacen del territorio del Xeoparque del Cabo Ortegal un auténtico viaje al interior de la Tierra.

Actualmente se está trabajando en paralelo en diferentes proyectos, destacando la puesta en marcha de las actuaciones incluidas en el Plan de Sostenibilidad Turística en Destinos, por un importe total de 1,5 millones de euros. Estas actuaciones se enfocan en el diseño y puesta en marcha de un producto turístico especializado, basado en el geoturismo como fio conductor de esta estrategia, compuesta por cuatro ejes prioritarios: transición verde y sostenible, eficiencia energética, transición digital y competitividad. Todas ellas está previsto que se lleven a cabo nos próximos 2 años.

Otra de las acciones inmediatas que se llevarán a cabo desde la asociación para la gestión del Xeoparque del Cabo Ortegal será el proceso de selección de un equipo técnico propio, encargado de coordinar y definir la estrategia de los próximos años, garantizando así la estabilidad del xeoparque y la consecución de los objetivos marcados.

Declaraciones

Así, los componentes de la asociación para la gestión del Geoparque Cabo Ortegal, resaltan a importancia de tener alcanzado este hito: “Es una gran oportunidad para el desarrollo socioeconómico de los 7 ayuntamientos, porque un Xeoparque, sobre cualquier otra cosa, es un proyecto de desarrollo territorial. Supone algo más que un impulso al turismo, contribuyendo a generar oportunidades en el sector primario, mediante un aprovechamiento sostenible del territorio, y también para estimular al sector secundario. Sin duda es una oportunidad para reforzar y potenciar el trabajo en red que se lleva haciendo todos estos años, apostando por un crecimiento conjunto y armónico de todo el territorio.”

Por su parte, recibimos mensajes de apoyo de ambos auditores que estuvieron en el territorio el pasado verano.

César Goso: “A los gallegos de el GMU Cabo Ortegal, pobladores de Cariño, Cedeira, Cerdido, Moeche, Ortigueira, San Sadurniño y Valdoviño, muchas felicitaciones por este reconocimiento de UNESCO, que celebra vuestro patrimonio natural y cultural, y mi especial agradecimiento por lo que pude aprender allí, y a la oportunidad de reconocer en vosotros el don de gente, que cómo el de otros muchos gallegos contribuyeron a forjar el país donde vivo. Reciban un cálido saludo desde Uruguay y en particular de el GMU Grutas de el Palacio. Ojalá podamos interactuar a través de algún proyecto el actividad en el futuro, para conocer más y acercar quizás la parientes y amigos de ambos lados de el océano.

Chris Woodley-Stewart: “Sí nuestra tarea hubiera tratado simplemente de una evaluación de el carácter, la singularidad y la pura belleza de un lugar, la conclusión habría sido fácil. Pero se trata de llegar al corazón de un sitio de forma muy rápida y comprender cómo podría funcionar como un Geoparque. Encontramos aquí un patrimonio natural y cultural excepcional que la comunidad protege, valora y comparte libremente. La gente entiende que su naturaleza y cultura son los principales bienes a largo plazo para la economía local y, además, sirve de sustento para su forma de vida en gran medida.

Debemos felicitar a todos los involucrados por su trabajo en la educación y la conservación, y en ayudar a las personas a disfrutar y comprender la geología, él paisaje y la cultura de este sitio. Sé que la gente apasionada detrás de un lugar que apasiona se asegurará de que Cabo Ortegal se convierta en un excelente Geoparque Mundial de la UNESCO y que esta designación supondrá un beneficio real para la zona”.