EL AUTODITORIO DE CEDEIRA ACOGE ESTE SÁBADO LA OBRA DE TEATRO “ESAS COSAS MARAVILLOSAS”
El Auditorio de Cedeira acoge este sábado a las 20.30 horas a representación de “Esas cosas maravillosas”, el tierno y emocionante relato de un niño que afronta el intento de suicidio de su madre reuniendo en una lista todas las razones por las que paga la pena vivir. El actor Elisardo de la Cruz y Empatía Teatro producen esta obra con texto del dramaturgo inglés Duncan MacMillan. Las personas interesadas pueden reservar sus localidades anticipadamente enviando un mensaje por whatsapp al número 649 87 66 14. El precio es de 2,5€.
Elisardo de la Cruz estrenó la obra el pasado año en el Festival Internacional del Monólogo “Singular” del Patronato de la Cultura de Narón y desde aquella más de dos mil personas han visto “Esas cosas maravillosas”, con llenos en A Coruña, Boiro y Carballo.
El texto que escribió Duncan MacMillan hace una década, y que se mantuvo en escena con las entradas agotadas durante tres años en el Festival de Edimburgo, está hoy de total actualidad por el preocupante aumento de los casos de suicidio, especialmente entre adolescentes. “Esas cosas maravillosas” es un monólogo que se va construyendo con la participación del público y que trata el tema de una manera natural y humana, con toques de humor y con una visión esperanzadora.
También el mismo sábado, el establecimiento El’Muelle acogerá la presentación del libro “Me llamaré Silver Stardust”, que Nuria Martínez Deaño (Madrid, 1971) terminó de escribir en Cedeira, localidad en la que reside desde la pandemia. Esta editora, traductora y periodista, hija y neta de gallegos, encontró en la villa a tranquilidad necesaria para sacar adelante su primera novela, que ya ha recibido el aplauso de Rosa Montero –la consideró una obra “tensa, afilada y estremecedora”-.
“Me llamaré Silver Stardust” es la historia de un yonqui que deambula por el Madrid de los años 90 en busca de redención, a través del cual conocemos a España de los 70 y los 80 y la brecha generacional que marcó la relación entre padres y hijos en aquellos años posteriores al franquismo.
